Antes pensaba que un Club de Lectura era para ratones de biblioteca y que no cualquiera podía entrar. Pero al hacer parte del Club de Lectura Vía Exlibris en el Parque Biblioteca de Belén, me di cuenta que todos aquellos rumores que decían eran una total falacia.
Al entrar por recomendación de una amiga que también quería pertenecer al club, conocí muchas personas, de diferentes edades, culturas completamente diferentes, realidades, gustos variados y claro, algunos de otro país o región de Colombia. Muchos se fueron, nuevos entran y otros se quedaron y siguen disfrutando de la lectura con los demás miembros del club.
En mi vida nunca pensé pertenecer a un club lectura, creía que era aburrido, rodeada de personas consideradas "nerds" donde yo no encajaba para nada. Sobre todo, porque no leía libros por voluntad propia, no obstante, eso cambió al comenzar a leer una saga que una de mis mejores amigas me recomendó con insistencia. Dicha saga es Cazadores de Sombras, de Cassandra Clare.
Han pasado ya casi cuatro años que voy cada viernes a las 5 p.m. a encontrarme con mis compañeros del club, quienes quiero con todo el corazón y son mi tercera familia después de mi grupo de baile.
En el club he aprendido demasiado: desde lo bonito y hermoso que puede ser una historia y sus personajes, hasta la terrible realidad que se puede presentar con los libros distópicos. Hablamos y analizamos sobre el amor, el odio, el egoísmo de los personajes, las razones de su comportamiento, personalidades y de sus realidades dadas por el autor. Cada viernes están llenos de misterio, la intriga de saber qué es lo que sigue en el libro, lo cuidadosos que debemos ser para el análisis literario o las diferentes opiniones y puntos de vistas que enriquecen la conversación.
Ahora puedo decir tranquila y orgullosa que pertenezco a un Club de Lectura, donde hay personas maravillosas que me han ayudado a crecer y me aportan a lo que soy ahora. Así, si alguna vez tienes dudas e incógnitas sobre un Club de Lectura, toma mi consejo y no le des vueltas: únete a uno, no te arrepentirás de esa elección.
Al entrar por recomendación de una amiga que también quería pertenecer al club, conocí muchas personas, de diferentes edades, culturas completamente diferentes, realidades, gustos variados y claro, algunos de otro país o región de Colombia. Muchos se fueron, nuevos entran y otros se quedaron y siguen disfrutando de la lectura con los demás miembros del club.
En mi vida nunca pensé pertenecer a un club lectura, creía que era aburrido, rodeada de personas consideradas "nerds" donde yo no encajaba para nada. Sobre todo, porque no leía libros por voluntad propia, no obstante, eso cambió al comenzar a leer una saga que una de mis mejores amigas me recomendó con insistencia. Dicha saga es Cazadores de Sombras, de Cassandra Clare.
Han pasado ya casi cuatro años que voy cada viernes a las 5 p.m. a encontrarme con mis compañeros del club, quienes quiero con todo el corazón y son mi tercera familia después de mi grupo de baile.
En el club he aprendido demasiado: desde lo bonito y hermoso que puede ser una historia y sus personajes, hasta la terrible realidad que se puede presentar con los libros distópicos. Hablamos y analizamos sobre el amor, el odio, el egoísmo de los personajes, las razones de su comportamiento, personalidades y de sus realidades dadas por el autor. Cada viernes están llenos de misterio, la intriga de saber qué es lo que sigue en el libro, lo cuidadosos que debemos ser para el análisis literario o las diferentes opiniones y puntos de vistas que enriquecen la conversación.
Ahora puedo decir tranquila y orgullosa que pertenezco a un Club de Lectura, donde hay personas maravillosas que me han ayudado a crecer y me aportan a lo que soy ahora. Así, si alguna vez tienes dudas e incógnitas sobre un Club de Lectura, toma mi consejo y no le des vueltas: únete a uno, no te arrepentirás de esa elección.
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